El amor fraterno y el ángel exterminador (Jueves Santo)

Hoy, Jueves Santo, en el día que llamamos de amor fraterno, nos haces escuchar que los que estén fuera de la casa marcada con sangre serán eliminados por el ángel exterminador.

Y en el extrañamiento y distancia con los que acojo este texto me vas guiando para entender que entiendo mal, que si miro con los ojos de los hijos de Babel siempre entenderé que hay bandos, que están los míos y los otros, los de tu casa y los de fuera; y leído el texto así no habla con palabras de tu baca, sino con las del ídolo creado por un corazón herido de pecado.

Y me muestras una casa donde han sido invitados todos los vecinos, todos los prójimos, como dice el texto que hay que hacer; una mesa donde están todos invitados, también los que tienen un corazón tentado de traición, de estar en uno u otro bando. Y me muestras una sangre que los cubre a todos porque todos tienen las manos manchadas, una sangre que ya no acusa a sus hermanos sin embargo, sino que fluye como sangre de vida nueva empujada a borbotones por la misericordia, reuniendo a todos en un solo cuerpo nuevo de humanidad.

Y me dices que sí, que el que quede fuera de esta casa será herido mortalmente por el ángel exterminador, por ese ángel que nace no en el cielo, sino en el corazón ensimismado, egoísta, prepotente y destructor del hombre; que nunca vivirá la descendencia engendrada fuera de tu casa porque su raíz es la muerte.

Y me invitas a quedarme, porque me doy cuenta de que ya estoy en esta casa tuya como todos, recogido por tu compasión. Me invitas entonces a elegirte a ti que ya me has elegido y sentado a tu mesa y me has lavado los pies y me miras sin resquicio de rencor.

Y entonces me doy cuenta que eres tú, el Dios verdadero, el que hablas; el Dios que nos hace hermanos antes de que sepamos serlo, y extiendo la mano para coger el pan de tu mano, la vida que eres tú y nunca niegas.

Y voy comprendiendo; y ahora que comprendo, me invitas a creer.


Pintura de Francis N. Souza, La última cena.

Comentarios

Entradas populares de este blog

LA CELDA. Jornada pro orantibus - 2023

Los ángeles de la noche (cuento de Navidad)